“La señora Brown dice que en Londres todo el mundo es diferente y eso significa que cualquiera puede encajar. Creo que tiene razón: aunque no me parezco a nadie más, realmente me siento como en casa. Nunca seré como los demás, pero está bien, porque soy un oso; un oso llamado Paddington”.
Así habla de Londres este oso, un personaje imaginario de literatura infantil del escritor británico Michael Bond, quien da vida a un oso andino, encontrado por la familia Brown en la estación londinense de trenes de Paddington, de donde recibe su nombre. Una ciudad, donde todo el mundo encaja, en la que te sientes como en casa; con gente amable dispuesta a ayudar y donde puedes caminar por horas maravillándote de cada rincón; el hogar de algunos de los mejores escritores de todos los tiempos, el escenario de personajes memorables y la inspiración de innumerables obras literarias como “Sherlock Holmes” de Sir Arthur Conan Doyle, “Peter Pan” de J. M. Barrie, "Mary Poppins" de P. L. Travers, "La señora Dalloway" de Virginia Woolf, y hasta “Harry Potter” de J. K. Rowling.
Esto es Londres; la capital de Inglaterra y del Reino Unido, situada a orillas del Río Támesis; una ciudad vibrante y uno de los centros culturales y artísticos más importantes del mundo, que se roba el corazón de los visitantes, con sus mercados, museos, música, pubs, parques; su Metro, llamado The Tube (El Tubo, por la forma de sus túneles) que es el más antiguo del mundo, inaugurado en 1863 y el Big Ben, su principal símbolo…
Llegamos al aeropuerto de Heathrow de donde tomamos un tren rápido (15 min) a la estación de "Paddington" y de allí, el metro hasta la estación “Charing Cross” que nos acerca a nuestro hotel, el “Strand Palace”, ubicado en el centro de la ciudad, con fácil acceso al metro y desde donde puedes moverte sin problema a la hora de conocer la ciudad.
Nuestro recorrido inicia en la “Plaza de Trafalgar” (Trafalgar Square), construida para conmemorar la batalla naval de Trafalgar, donde la tercera coalición (Reino Unido, Austria, Rusia, Nápoles y Suecia) intentaba derrocar a Napoleón Bonaparte; en esta batalla, la armada británica venció a las armadas francesa y española. Hoy en día, la plaza es lugar habitual de manifestaciones públicas y eventos artísticos; en el centro de la plaza encuentras la columna del Almirante Nelson, rodeada por fuentes y 4 enormes leones de bronce, de cuyo metal se dice, es proveniente de un cañón de la flota francesa.
Al norte de la plaza, encuentras la Galería Nacional, cuyo ingreso es gratuito (como todos los museos de la ciudad) pero es recomendable que reserves tu entrada en las páginas oficiales, para facilitar el ingreso sin necesidad de hacer enormes filas.
Seguimos nuestro camino para encontrarnos ahora con “Horse Guards Parade”, un gran campo donde se llevan a cabo diferentes desfiles y ceremonias. Allí cerca, está el “Monumento a las Mujeres de la Segunda Guerra Mundial” un enorme rectángulo de donde sobresalen uniformes, cascos y ropa que simbolizan los diferentes trabajos que las mujeres asumieron en la ll Guerra Mundial, mientras los hombres se encontraban en el campo de batalla.
Seguimos nuestro camino y logramos ver el monumento insignia de la ciudad: El imponente Big Ben. Aunque realmente éste es el nombre de la enorme campana que hay dentro de la Torre del Palacio de Westminster, sede del Parlamento, que fue inaugurada en 1859, tras construirse como parte del nuevo parlamento que reemplazó el antiguo, destruido tras el incendio de 1834. La Torre del Reloj completa pasa a llamarse oficialmente en 2012, en honor al jubileo de diamante (aniversario 60) de la Reina Isabel ll, la “Torre Elizabeth”. En todo este tiempo (165 años) el reloj, se ha retrasado en dos ocasiones por factores climáticos. Sus campanas solo se han silenciado en 1916 para proteger a la ciudad de los bombardeos alemanes, como muestra de respeto en funerales ilustres como el de Winston Churchill y Margaret Thatcher, o por trabajos de mantenimiento.
El “London Eye” (Ojo de Londres ) es la atracción turística más popular del Reino Unido, en la orilla sur del río Támesis; una rueda con una altura de 135 metros que ofrece una vista panorámica de hasta 25 km en todas sus direcciones; conformada por 32 cabinas que representa cada una, un barrio de la ciudad; pero no existe la número 13 (probablemente por cábala).
La "Abadía de Westminster", declarada Patrimonio de la Humanidad, es uno de los edificios religiosos más significativos y emblemáticos, considerada como la principal iglesia anglicana del mundo; donde han tenido lugar todas las ceremonias de coronación, bodas reales y funerales relevantes como el de la princesa Diana de Gales; al igual que el lugar donde han recibido sepultura muchos monarcas y personajes ilustres como Isaac Newton, Charles Dickens, Charles Darwin, entre otros…
El Palacio de Buckingham, situado en el barrio de Westminster, es la residencia oficial de la monarquía británica en Londres, (actualmente de Carlos lll), y sede de ceremonias oficiales y visitas de Estado. Puedes ingresar a Palacio en ciertos meses del año, para ello debes conseguir las entradas con antelación. Desde afuera, puedes ver si el Rey se encuentra en el Palacio, pues si está ondeando la bandera de la Casa Real, significa que está “en casa”, de lo contrario, si ondea la bandera de “Union Jack” (la famosa bandera de Gran Bretaña o Reino Unido, que es el resultado de sobreponer las banderas de Inglaterra, Escocia e Irlanda) significa que el monarca está ausente. Frente al Palacio, tiene lugar el famoso “Cambio de Guardia”, una ceremonia en que los guardias encargados de la seguridad real son relevados, llevando siempre su uniforme con abrigos rojos y sombreros negros de piel de oso; todos desfilan al son de marchas tocadas por la banda del regimiento. Nosotros logramos ubicarnos en el Monumento de la Reina Victoria, justo al frente del Palacio, donde logras tener una buena vista de toda la ceremonia.
Piccadilly Circus; es la plaza más famosa de la ciudad; conocida por su fuente de Eros en el centro, las vallas luminosas y los innumerables restaurantes, bares, teatros y tiendas del famoso barrio Soho.
Para complementar nuestra visita a la ciudad, decidimos hacer un crucero por el río Támesis, (Thames River Sightseeing) desde Westminster hasta Greenwich; en este recorrido se ven importantes monumentos icónicos como el Big Ben, London Eye, la Catedral de San Pablo, el Puente del Millennium, el Puente de Londres (London Bridge) que es el primer puente sobre el Támesis; la Torre de Londres (que fue inicialmente una prisión), el imponente y fascinante Puente de la Torre (Tower Bridge) que es el puente colgante de dos lados con un tramo levadizo que se abre para dar paso a los barcos de gran altura; es un magnífico recorrido por el río hasta llegar al distrito de Greenwich, donde se encuentra el Meridiano Cero (longitud 0) de donde se miden todas las longitudes del mundo y aquel que solo crees que existe en los libros de geografía; el Observatorio Real, el Cutty Sark, (un barco restaurado del siglo XIX) y el Museo Marítimo… un distrito hermoso de casas coloniales, donde aprovechamos para probar el “Fish & Chips”, el plato más famoso de la cocina inglesa, que consta de filetes de pescado frito, que tradicionalmente bañas con vinagre antes de comerlo y viene acompañado por papas fritas y guisantes.
Otra de las opciones para disfrutar de la ciudad, es recorrer los mercados… nosotros teníamos uno cerca al hotel, el Covent Garden, que fue un famoso mercado de flores y frutas y ahora está lleno de tiendas y puestos de artesanías; pero uno de los más auténticos es sin duda Camden Market que junto al Stables Market, se encuentran en la zona de Camden Town; un centro de entretenimiento, moda, música, gastronomía y tribus urbanas donde te encuentras con punkeros, hipsters, rockeros; puedes pasearte por puestos de música, libros, antigüedades, ropa y hasta porque no, de tatuajes y piercing!
La ciudad cuenta con innumerables museos, todos de acceso gratuito, donde puedes perderte por horas y disfrutar de interesantes recorridos; nosotros logramos visitar el “Museo de Historia Natural” ubicado en un precioso edificio con amplias salas o galerías donde encuentras desde minerales, rocas y gemas (incluyendo esmeraldas de Colombia), pasando por fósiles de dinosaurios, mamíferos y hasta un impresionante esqueleto suspendido de una enorme ballena azul. La "Galería Nacional" (National Gallery) es el museo de arte más importante de la ciudad donde podrás disfrutar de obras maestras de Van Gogh, Miguel Ángel, Rembrandt, Cezanne… y hasta Caravaggio, pintor italiano homenajeado en esta ocasión con una impresionante exposición: “The Last Caravaggio”.
Londres tiene infinidad de lugares que visitar y recorrer: mercados, museos, monumentos, parques, edificios históricos, librerías, miradores y barrios llenos de rincones mágicos, cafecitos y restaurantes, que son y seguirán siendo de gran inspiración literaria. Así que, como siempre decimos: Gracias a Londres por mostrarnos los encantos de una gran ciudad llena de historia, cultura y literatura. Como decía Paddington a su tía Lucy, que estaba en Perú: “Así es Londres; ojalá estuvieras aquí para que pudieras verlo con tus propios ojos!”.
Y como dicen los británicos: CHEERS MATE!!!! (Gracias, amigo!!)
Ana lu, escritora que muestra con detalles la magnificencia de Dios. Que delicia leerte y saber de ti. Eres la Bienamada de Dios. Abrazos. Jorge Villa.
Me dieron ganas de verme Paddington, escribirte todo muy lindo. Cheers Mate!
Anita, que bonito escribes! Increíble todos los lugares hermosos y como tú los haces brillar más con tus palabras!
Anita- gracias por llevarnos en ese viaje cultural por Londres, has descrito muy precisamente cada lugar , muy claro y es como hacer un viaje en las memorias. las fotos espectaculares. una delicia de lectura para acompañar un te con galletas en una lluviosa tarde…..
Espectacular relato! Inspira leerlo!